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Lesiones articulares y tendinosas: El tratamiento con factores de crecimiento y con células madre reduce la recuperación
Redacción.- El complejo hospitalario Ruber Juan Bravo ha puesto en marcha un programa de medicina regenerativa con células madre para el tratamiento de la patología articular y tendinosa.
Como destaca el Dr. Jesús Vilá y Rico, Jefe de Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología, el tratamiento con factores de crecimiento y con células madre, se aplica para frenar la progresión de la artrosis, especialmente en grandes articulaciones de carga como la rodilla o la cadera. También promueven la reparación del cartílago y reducen los síntomas característicos de la artrosis: inflamación de la sinovial, derrame, deformidad, dolor, pérdida de movimiento, etc. Asimismo, se aplica en lesiones de hueso, tendón y músculo para reducir su tiempo de recuperación.
Tratamiento con factores de crecimiento
Tal y como recoge Quirónsalud, el tratamiento se realiza bajo prescripción médica, en un ambiente estéril y anestesia locoregional.
La mejora de la sintomatología, es decir, la disminución del dolor e inflamación es el principal beneficio, y además no tiene efectos secundarios ni riesgo de rechazo o intolerancia, ya que proviene de la propia sangre del paciente. En el caso de las lesiones tendinosas y musculares la cicatrización es mucho más rápida. Este tratamiento solo está contraindicado en caso de infección local, de procesos neoplásicos y ciertas enfermedades de la sangre.
Para su aplicación, primero se extrae sangre al paciente, después se procesa y la porción del plasma rico en factores de crecimiento se infiltra en la zona a tratar. El proceso, que puede durar entre 25 y 40 minutos, se realiza en un ambiente estéril.
Respecto al número de infiltraciones, en patología articular, que es la más frecuente, se realizan 3 sesiones durante tres semanas consecutivas, con una sesión de recuerdo a los seis meses o un año si la evolución es favorable. Para el resto de las patologías el protocolo puede ser distinto, pero no hay un periodo de recuperación tras una infiltración, de forma que el paciente puede hacer vida diaria normal desde el primer momento