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La OMS recomienda fortalecer los sistemas de salud y mejorar la formación de los sanitarios en la epilepsia
Redacción.-La epilepsia es una enfermedad cerebral caracterizada por ser una de las patologías neurológicas más frecuentes en todo el mundo, que afecta a unos 50 millones de personas de todas las edades. Tiene consecuencias neurológicas, cognitivas, psicológicas y sociales y representa un riesgo de muerte prematura tres veces superior al de la población general.
Tal y como recoge Farmaindustria, a pesar de la disponibilidad de un importante abanico de opciones terapéuticas, la realidad es que en el mundo hay un gran porcentaje de población afectada que no tiene acceso a los antiepilépticos. “Sabemos que el 80% de las personas con epilepsia viven en países con ingresos bajos y medianos y que la mayoría de ellos no tienen acceso al tratamiento. Esto ocurre a pesar de la existencia de medicamentos eficaces”, recoge la Organización Mundial de la Salud (OMS) en su último informe sobre la patología, titulado Epilepsia, un imperativo de salud pública y realizado en colaboración con la Liga Internacional contra la Epilepsia y Oficina Internacional para la Epilepsia. Y no es un problema del coste del medicamento, puesto que, como apunta el informe, aumentar “la disponibilidad sistemática de antiepilépticos sería posible con un costo anual que puede llegar a ser de tan solo US$ 5 por persona”.
En este sentido, la OMS propone “integrar el tratamiento de la epilepsia en la atención primaria, la formación de profesionales no especializados, la inversión para garantizar la continuidad del suministro de antiepilépticos y el fortalecimiento de los sistemas de salud pueden reducir sustancialmente el déficit terapéutico existente”.