Eva Liljeström: «Por nuestra sangre y orina circulan sustancias derivadas de los plásticos»

Pregunta- ¿Estamos más expuestos a los tóxicos de lo que realmente creemos?

Respuesta- Desde luego que sí, y lo hacemos sin percatarnos, desde el aire que respiramos hasta el detergente que usamos o la crema que nos aplicamos. Ácaros, virus, bacterias, plásticos, pesticidas, metales pesados… Todo ello está en nuestro hogar, por lo que estamos expuestos a diario a través del olfato, la piel, la alimentación… El alcohol y el tabaco están super normalizados, pero desde luego son grandes tóxicos.

P- ¿Qué consecuencias pueden provocar en nuestra salud?

R- Por nuestra sangre y orina circulan sustancias derivadas de los plásticos. Sabemos que algunos perfumes pueden afectar al sistema nervioso central, aumentar el riesgo de depresión, desencadenar patologías respiratorias, mientras que algunas sustancias que usamos pueden provocar dermatitis, reacciones alérgicas, dolores de cabeza, náuseas, gastritis, problemas intestinales, desajustes hormonales, síndrome de fatiga crónica…

«El alcohol y el tabaco están super normalizados, pero desde luego son grandes tóxicos»

P- ¿Cuánto y cómo deberíamos ventilar?

R- Por norma general se recomienda al menos entre 15 y 20 minutos, con las puertas y ventanas abiertas para que corra el aire y hagamos un «détox» a la atmósfera de la casa. El polvo del hogar es más importante de lo que creemos y he aprendido que la escoba no sirve para nada, solo para remover la porquería. Lo más útil es aspirar y ventilar.

«La escoba no sirve para nada, solo para remover la porquería. Lo más útil es aspirar y ventilar»

P- ¿Qué deberíamos eliminar del hogar?

R- Hay productos de limpieza que son más propios de la desinfección de un quirófano. Con agua, vinagre de limpieza y jabón natural se puede limpiar perfectamente. Y eliminar todos los perfumes, ambientadores… Si te gusta que tu casa o que tu ropa huelan bien, usa aceites esenciales.