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Dr. Fernández: «Las personas con obesidad presentan un estado inflamatorio de bajo grado»
Redacción.- Juan Pedro Fernández Corbelle, director médico de Preven Salud, aborda en una entrevista con La Razón las enfermedades relacionadas con la obesidad.
A continuación se recoge parte de la entrevista:
Pregunta- ¿La obesidad altera los genes y nos hace más débiles?
Respuesta- Cuando hablamos que un factor externo, como puede ser una enfermedad, produce alteración de los genes nos estamos refiriendo a la EPIGENETICA. Esta ciencia estudia los mecanismos que regulan la expresión de los genes sin una modificación en la secuencia del ADN que los compone. Establece la relación entre las influencias genéticas y ambientales que determinan lo que al final aparece en un individuo concreto y que conocemos como fenotipo. Pues bien, en un estudio en ratones, recientemente publicado, se ha visto que la historia pasada de obesidad desencadena cambios epigenéticos persistentes en la inmunidad innata y exacerba la neuroinflamación.
«Las personas que padecen obesidad presentan lo que se conoce como un estado inflamatorio de bajo grado»
P- ¿De qué tipo de alteración estamos hablando?
R- Sabemos, desde hace tiempo, que las personas que padecen obesidad presentan lo que se conoce como un estado inflamatorio de bajo grado, y esta situación se ha relacionado con diversas enfermedades.
P- ¿Cuál es exactamente la relación que existe entre la obesidad y la inflamación?
R- Hablamos de inflamación celular silenciosa (o de bajo grado) para referirnos a la inflamación imperceptible de un órgano o tejido que se produce como consecuencia de la activación de mecanismos inflamatorios en respuesta a la detección de una amenaza.
Sin embargo, aunque se trata de un importante mecanismo de defensa, su activación estimula la secreción de enzimas que atacarán al tejido sano para deshacerse del problema. Así, si se hace crónica (por una continua exposición a agentes nocivos, como es la obesidad) termina por dañar al órgano o tejido en cuestión.
«Se ha considerado al sistema nervioso central como inmnológicamente privilegiado ya que se suponía que la barrera hematoencefálica le protegía del paso de sustancias tóxicas»
P- ¿Y esa alteración puede contribuir a la predisposición de enfermedades neuroinflamatorias?
R- Durante mucho tiempo se ha considerado al sistema nervioso central como inmnológicamente privilegiado ya que se suponía que la barrera hematoencefálica le protegía del paso de sustancias tóxicas. Esto es prácticamente verdad en cuanto a sustancia tóxicas externas pero no a cuadros inflamatorios propios del organismo.
Así, diversas enfermedades del sistema nervioso central se han realizado con estos cuadros de exacerbación inflamatoria y han dado al estudio en profundidad de enfermedades neuroinflamatorias.
Entre ellas podríamos incluir la degeneración macular relacionada con la edad (DMAE) a la que hace referencia el estudio en ratones recientemente publicado, donde se afirma que se ha comprobado que la obesidad confiere memoria a los macrófagos y que la programación epigenética de las células mieloides en la obesidad contribuye a la degeneración macular.