Higado de Sepsis

La afectación hepática en las infecciones extrahepáticas puede ir desde una leve alteración de las pruebas de la función hepática hasta una auténtica hepatitis aguda, que puede condicionar una insuficiencia hepática. Su incidencia no depende sólo de la gravedad de la infección, sino también de su localización, siendo las infecciones pulmonares y las del tracto urinario las que con más frecuencia se asocian a alteraciones hepáticas.

El cuadro clínico está dominado por la infección primitiva, existiendo fiebre y, en casos graves, los signos de sepsis con fallo multiórgano. La afectación hepática da origen a un cuadro de colostasis, con elevación de la bilirrubina directa y en menor grado de la fosfatasa alcalina y las transaminasas. La ictericia aparece 2-3 días después del comienzo de la infección.



Publicidad

Protagonistas

Publicidad

¿SABÍAS QUE…?

Actividades Sanitarias