Anemia por Hemorragia Aguda

Las pérdidas sanguíneas agudas representan una doble amenaza para la homeostasis del organismo. La brusca reducción de la volemia puede dar lugar a colapso circulatorio y muerte, si la hemorragia es gradual o existe un restablecimiento de la volemia mediante redistribución del plasma, una reducción importante de la masa eritrocitaria puede dificultar el aporte de oxígeno a los tejidos. Las manifestaciones clínicas dependerán del volumen de sangre perdido. Con pérdidas inferiores al 20%, el paciente suele estar asintomático o presentar solamente taquicardia de esfuerzo. A partir del 20% aparecerán palidez, sudoración y taquicardia como expresión de los mecanismos compensadores para mantener el aporte de oxígeno a los tejidos.



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